Acabaron ya las Hogueras y pocas novedades gastronómicas hemos vivido.
Empezamos el día 20 comiendo en el Koki. Es un bar de los de toda la vida que se encuentra en el Barrio (junto al claustro de la Concatedral de San Nicolás) y donde te sirven picoteo típico: bravas, pulpo, calamares, verduras a la plancha, montaditos.... Está todo bastante bueno y el precio es más que razonable.
Al día siguiente montamos comida en el Corsario donde tomamos unas ensaladas, la Sagrada ensaladilla rusa y arroz de pollo y conejo. Estupendos los arroces.
Un día más tarde, el 22, fui a comer a la aventura con unos antiguos compañeros de trabajo a un bar de la calle Castaños que se llama Casa Gilda. Bastante lamentable. Casi nada de lo que sacaron estaba bueno y el servicio no se carecterizó por la rapidez. Y eso que no habría ni dos mesas más comiendo. Intentaré no volver.
El día 23 volvimos al Corsario donde esta vez pasamos del arroz y nos metimos en el picoteo típico de cuando vamos a comer allí. Es decir, pichas marinas, ensaladilla, calamar plancha, entrecot con ajos tiernos... Magnífico todo y en una calle muy tranquila y con sombrita.
El día 24 acabamos, como viene siendo tradición, en la barraca del Mosca y Mónica donde degustamos un marisco exquisito y una fideua de muy alto nivel. Y en cantidad.
Volveremos el año que viene (si nos invitan, claro).
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Hola Pedro,
ResponderEliminarMucho tiempo sin leerte y me está costando ponerme al día!! Creo que haces un buen trabajo con el blog y te pido que no dejes de hacerlo aunque algunas veces como ahora no coincidamos porque a mi el Koki no me gusta nada... De todas formas estoy contigo con lo de Casa Gilda estas hogueras porque con dos mesas parecían desbordados. Yo acostumbro a dar segundas oportunidades y voy a intentar volver al koki!! Porque cuando volví a Casa Gilda este otoño parecía otro bar.
Hola Antonio. Gracias por pasarte por mi humilde blog. Como bien sabrás, el Koki es un lugar que huye de complicadas elaboraciones y se decanta de las típicas tapas. Siento que el día que fuiste no te gustara nada. La verdad es que yo no he vuelto pero aún recuerdo una agradable comida con mis amiguetes después de la mascletà y a un precio bastante razonable.
ResponderEliminarUn saludo.